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Tanto feminismo y tanta polla, y todavía no he visto a ninguna feminazi a voz en grito por la creación del derecho a menstruar.

Este feminismo capitalista, que lo único que pretende, a lo Inés Arrimadas, es incorporar a la mujer al sistema de producción remunerado, mientras que sigue cre/criando los hijos de los patriarcas GRATIS, POR LA PUTA CARA, y además de ser LAS CHACHAS DEL MUNDO, y LAS MADRES DEL MUNDO, ahora también tienen que ser LAS EINSTEINS DEL MUNDO y trabajar gratis en casa y además trabajar remuneradamente fuera de casa, para así PODER SER MUJER.

Y, entre tanto, MENSTRUAR, que es lo que quizás sea la madre del cordero en cuanto a diferencias entre hombres y mujeres, es algo que hacemos A ESCONDIDILLAS.

REPITO:

MENSTRUAMOS A ESCONDILLLAS,

Y tapamos esa cosa fea de la mirada de los hombres, que lo ven como ALGO INCONFESABLEMENTE ASQUEROSO. Y que los pobres hombres progres se automentalizan en la creencia de que son modernos y ‘comprenden la menstruación’ porque le compran tampones y compresas a sus chicas, y no les da ninguna vergüenza, VENGA YA! ES ESO LO ÚNICO QUE PUEDEN APORTAR RESPECTO DE ESTE TEMA? Really?

La menstruación: esa cosa que uno no sabe dónde meter, esa cosa que LE HACE PERDER DINERO al sistema, como dijo Codere que hacía, que estaba perdiendo dinero por el coronavirus, siemplemente porque estaba dejándolo de ganar, y cuando vengan los extraterrestres y volatilicen todo el dinero sobre la faz de la tierra, simplemente porque ellos no conocen este absurdo concepto, entonces, también CODERE le pedirá al gobierno que le indemnice contra los extraterrestres, porque sin duda, su objetivo de acumular dinero como si fueran figuras del Lego es mucho más legítimo y más racional que el de los extraterrestres, dónde va a parar.

¿Me he vuelto a ir? Ah, sí: el derecho a menstruar.

Mucho se ha hablado de la diferencia entre el ser humano, los animales y, cuando vengan, los extraterrestres, pero poco se ha incidido en que quizás lo que más nos distinga sea el hecho de que el ser humano crea derechos, mientras que los animales, no.

Y aunque ya sabemos que Eleanor Roosevelt hizo mucho en la creación de los derechos humanos, oh, qué bien, la mujer mirando por todos, luego dicen los machirulos que solo miramos por nosotras PORQUE YA NOS HEMOS CANSADO DE LAVARLES LOS CALCETINES Y LLEVARLES EL COLA-CAO A LA PUTA CAMA, sí, aunque nadie duda del papel de las mujeres en la creación de derechos, yo, que ahora soy mujer pero que un día fui hombre y tengo un instinto de auto-conservación más puro, no entiendo por qué todavía NADIE, esto es, NAIDE, ninguna mujer, ni ningún hombre, ha luchado porque los días de la menstruación sean días off, es decir, días libres, en los que la mujer bastante tiene con menstruar, que no es cosa fácil, sobre todo porque la medicina del patriarcado, como no sangra, LE SUDA LA POLLA si hay mujeres con migrañas premenstruales que las paralizan por completo, o si algunas se doblan de dolor, o si tienes que ir al trabajo, a los niños, a cuidar a la abuela, a la compra, al puto lavavajillas, y a chupársela a tu marido, y además, con un dolor de ovarios, de cervicales, de riñones MONSTRUOSO.

Dicen que una de las estrategias de Hitler para establecer la paz social y hacer parecer que era socialista, recordemos, ‘nacional-socialismo’ son dos conceptos juntos, fue establecer el día del trabajador en Alemania.

Ahora, una forma de conseguir esta paz social es la de que el sistema de producción irracional en el que estamos inmersos como ratas haciendo correr una rueda que a lo único que conduce es a la destrucción del planeta y de nosotros mismos, es dejar a las mujeres menstruar tranquilamente, haciendo que este proceso no sea una puta vergüenza nacional, sino un trabajo sagrado.

Y sí, el estado o las empresas deberían pagar la existencia de las mujeres durante sus días de menstruación.

¿Te parece muy radical? Pues si lo es, es que es bueno.

Ya veremos qué dicen los extraterrestres cuando vengan y se lleven a toda la gentuza de las máquinas tragaperras y demás trampas para pobres por delante.