DIARIO DE UNA BIBLIOTECARIA PRECARIA: Terrorismo bibliotecario
Si algo se puede decir sin temor a equivocarse es que los organizadores del evento una vez más se han lucido y han hecho gala de su brillante incompetencia. Si ya de entrada parecíamos un redil haciendo cola para aparcar, si buscábamos el aula como pollo sin cabeza puesto que han comenzado a llamar antes […]